Raging Bull

Biografía especialmente lograda del boxeador extraordinariamente brutal Jake La Motta, que fue magistralmente interpretado por Robert De Niro. Boxeador en pos de encontrar el éxito; valiente, luchador, un auténtico "toro del Bronx". Sin embargo, su fuerte y excéntrica personalidad y su entorno acaban por convertir su vida en un continuo descenso hacia el fracaso. Los celos hacia su mujer es uno de los puntos clave del argumento, lo que le acaba sumiendo en una espiral de autodestrucción.

Está rodado en blanco y negro y esto me lleva rápidamente a familiarizarme con la época. Observo un contraste medio durante toda la película, que me da una gran naturalidad, excepto en las escenas de combate que se usa un contraste alto para reflejar de un modo más vivo la violencia y brutalidad de las tomas. En las escenas rodadas en el ring, observo primeros planos en los rostros de los boxeadores que me acerca a la fuerza y expresión de un boxeador. Jake LaMotta me aparece usualmente en contrapicado, y ésto le hace aún más protagonista de lo que estoy viendo, alguien especial y superior al resto. Para enseñarme la multitud y los espectadores de los combates se utilizan planos generales medios con tomas cortas que me transmite una sensación de caos. En las tomas grabadas fuera del ring, (la gran mayoría) abunda los primeros planos hacia el protagonista que de esta manera se me refleja de un modo muy eficaz, su incontrolable carácter y sus sucesivos cambios de estado anímicos.

Robert De Niro, una vez más, me regala una actuación titánica. Logra enfurecerme, logra que sea partícipe de su furia y de su cólera y le hace compadecerse de sus errores y fracasos. Logra todo lo que un gran actor debe lograr para dar una actuación perfecta.

Es una visión perfecta de la victoria y el fracaso y la delgada línea que hay entre uno y otro, que nos puede hacer pasar de estar en la cumbre a estar en el abismo.

Como ven, se los recomiendo.