Lija 4-ever

Crudo relato de una chica que se ve inmersa en una espiral de desgracias que la irán hundiendo poco a poco. En ella, el director, Lukas Moodysson, consigue transmitirme el difícil sentimiento de la ternura en un ambiente gris, triste y desesperanzado. Lilja recorre su propio descenso a los infiernos con ingenuidad y placer, sin intuir lo que el destino nos tiene reservado a cada uno. Un recorrido vital y angustioso. Representa el mundo de la prostitución infantil de una manera sobrecogedora, contando paso a paso como engañan a niñas que viven en zonas marginales, ofreciéndoles una vida mejor para luego meterlas a putas en contra de su voluntad. Y la realidad ha de ser aún peor de lo que se cuenta en la película. Recomiendo visionarla.