lunes, 7 de septiembre de 2009

Videodrome

La idea de una señal televisiva que crea un tumor cerebral, que a su vez crea unas alucinaciones que actúan como método de control en las personas por parte de la ultraderecha americana con el fin de manipular a la población se me antoja delirante, pero del todo deliciosa.

Es, a mi juicio un clásico del cine "fantástico" de los años ochenta que, aunque envejezca estéticamente, tiene un poderío ideológico que es de rabiosa actualidad, y quién sabe si por muchos años más. Además de lo fantástico, visceral es la palabra que se califica al cine de Cronenberg, no sólo por las morbosas imágenes con las que suele deleitar, sino también por la garra que destilan la película, la fuerza de sus personajes, lo magnético de su historia.

Muy buena película del director David Cronenberg.

No hay comentarios: