martes, 27 de mayo de 2008

Excelente, me hace bien disfrutar las películas de los hermanos Coen, esta vez después de Fargo, The Big Lebowski, era el turno de ver The man who wasn't there y es la historia de un perdedor, siempre es la historia de un perdedor…como lo era el yerno de un rico empresario en Fargo o El Nota en The big lebowski o El que encontró la maleta en No country for old men. El perdedor de la película The Man who wasn’t there es un peluquero, un hombre desolado por las circunstancias de la vida, un don nadie que corta el pelo en la segunda silla, un hombre que lo que más conoce de su mujer es su infidelidad, y que cuida cada palabra como si no tuviera permiso para hablar, un hombre que sabe que es engañado por su mujer, y que siente que no nació para éste mundo. Cada gesto de Thornton (que interpreta al peluquero) dice algo diferente, aunque en el fondo, todo sea lo mismo. Con fotogramas en blanco y negro nos sumerge en una vida que aún no ha descubierto sus colores, mientras es narrada con su voz en off que me introduce en su interior y la cámara lenta me impulsa los pocos deseos del hombre de continuar con su rutina diaria, de querer cambiar pero no saber como, o lo que es peor, de no saber que es lo que sigue. Vean esta obra que vale la pena.

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